domingo, 26 de febrero de 2012


Tendríamos hambre de no habernos sabido tan dentro de sí. 
Habernos empujado un poco más fuerte y 
haber desaparecido de no. 
Tenernos tan empapados inventando sentidos que 
a saber si existen más allá de 
este cuerpo 
mío este otro 
cuerpo. 
Tuyo 
de. 
Estos nosotros que 
son vosotros que. 
Ellos que. 
Tu puta madre.
Dieta de semanas de días de horas de tiempo que pasa pero
no pasa no llega se va se queda se endurece y
tiene pretensiones de eternidad aún
esperando
su
momento.

jueves, 23 de febrero de 2012

Soy no soy


Soy la vida y un bisturí que su propia mano mueve al son de 
efervescentes deseos. 
No hago ruido no 
contengo no desprendo.
 Soy el poema de un piano que su mano junto a la otra mano late al son de 
descarados latidos. 
No hago musa no 
despierto no sueño no 
hago ruido.
Soy  el humo del café que relame su pestaña caída en la mejilla izquierda justo antes 
de prenderle fuego a la cicatrizada herida. 
No hago dolor no 
quiero dolor no 
pretendo violar huellas no 
hago musa.

Soy la barrera que es ceniza que no contiene pero sí viola el dolor. 
Soy una musa haciendo de piano que cicatriza heridas inclementemente cicatrizadas y hago ruido prendiendo fuego a los efervescentes deseos. Soy un sueño despierto que no duerme pero despierta piel a punto de caramelo a punto de eternizar el humo.

No.

martes, 21 de febrero de 2012



Tímidamente perdida me sumergí en las venas de aquella ciudad. 
Orgasmo tímidamente encontrado en medio de aquellos 
monstruosos grises 
sobre negros 
sobre pálidos rojos. 

Tímidamente confesé a mis propios pecados. 

Vida.

00:51


Una noche más 
Desnuda
en mi cama sin ti 
pero 
contigo
pero 
Sin ti. 

Es una de esas afirmaciones ridículas que 
se me escurren de las manos cuando
vomito humo de cigarrillo después de la media noche 
cuando 
Soy nieve a punto de entrar en arenas movedizas
y

Ya no me quedan enfoques que desenfocar cuando 
Me visto de otoño pálido y me doy prisa en encontrar 
un 
principio 
un

Baile a punto de estrellarse 
contra el suelo 
una 
Lágrima 
a punto de llorar 
un
Verso a punto de estallar 
una
Musa a punto de devorar 
Me.

Una noche más. Me despieza el ritmo de un piano mientras me desnuda el ritmo de una poesía a la entrada del grandioso baile del fin del mundo a punto de estrellarte contra el suelo a punto de llorar. 
Un gemido más uno menos seis
más. Pierdo.

Un
Penúltimo bucle a punto de verter la piel en otro cuerpo en
Soledad a manos despiertas
galopando
despeinando
goteando
derramando
desnudez a punto de fundirse con el suelo a
punto de coserse el llanto de las lágrimas al cuello a 
punto de violar la poesía
dulcemente con
violenta paciencia.

Ahora.



viernes, 3 de febrero de 2012



Descongelar latidos como concepto como imagen de invierno a seis bajo cero más. Tres grados más. Tres más en mi ángulo. Triángulo. Tres por seis. Veinte suspiros más como si fuera viento pero. No. Viento ya no pero. Te imaginas? 


Afirmo. Como concepto como ojalá ahora en seis metros bajo hielo bajo. Nieve en copos fundidos en capas y capas de. Miel. Pura miel. Suave miel más. Ocho kilómetros de saliva insaciablemente olvidada ahí donde. Ya no caben ojalás ya no. No. Pregunto.


Que cuando podríamos besarnos huele a cuando susurramos a. Eso que desprenden el Tú y Yo desabrochados. Jodidamente descongelados. Kilómetros de placer. Miles. Mil. Mi. No.